Primer paso: ¿Cómo elegir mi nombre de perfil?

Abrí Zonacitas, completé mi mail, la contraseña y… chan: Elige un apodo. He aquí la primera gran cuestión, para nada menor, ¿cómo quería que me llamen? Mil ideas se amotinaron en mi cerebro, bloqueando cualquier tipo de lógica. Es que era La oportunidad para empezar de cero. Las opciones eran muchísimas.

Podría ponerme un nombre de fantasía, bastante provocador, como Felina, y desencadenar una catarata instantánea de mensajes, aunque serían subidos de tono por demás. Me acordé entonces del comentario de una amiga y su reacción ante un MaquinaSexual78.

Lejos de parecerle terriblemente sexy le resultó violento y chau, ni una chance. ¿Quería propuestas indecentes? Podría también apelar al lado esotérico y sensible, y llamarme Cuartomenguante–creo que su versión masculina se acerca a Armonioso– y de seguro convocaría a más de un yogui vegetariano y amante del aire libre. ¿Quería tener que pilotear una situación “Vayamos al Jardín Japonés” en vez de salir a tomar algo?

Podía hacerme la intelectual y llamarme La Maga, a ver quién entendía el chiste, y hablar para siempre de libros, autores clásicos y contemporáneos, decidida a apuntar a citas en librerías, cines alternativos y otras actividades culturales. Entonces un amigo me confesó que el frecuentaba chats bajo el nombre Artaud pero no consiguió tener conversaciones que no fueran de música o poesía. Mmmm, mejor no.

Otra opción era el infalible diminutivo Valerita: nunca falla y su efecto resulta tan variable como insólito. Pero de nuevo, la cantidad de propuestas era inversamente proporcional al resultado potable de un “¿vamos a tomar un café?”

Opté por la realidad: Valeria. Así nomás y a secas, para que a la hora de salir de la virtualidad y conocer a mi “futuro” cara a cara el encuentro fuera cómodo, un fiel reflejo de la realidad o lo más similar posible.

Zonacitas tambien recomienda que elijas algo que te hable un poco más de vos, para que que te distingas.

Al fin y al cabo somos personas (no personajes)  de carne y hueso, hablemos o no por internet, no? Vos que pensás?

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