Besar en la primera cita no está mal, pero tampoco es una regla y en algunas ocasiones no es la mejor opción. Todo depende de cómo se dan las cosas, ¿no?

Si bien un beso tal vez no sea tan gran cosa, es una expresión íntima de afecto. Y significa que ambos están interesados en el otro. Por supuesto que hay diferentes tipos de besos, pero estamos hablando de ese primer y tímido beso, el que seguramente recuerden más adelante y el que deja en claro las intenciones de cada uno.

Ese beso significa: “Hey, vos y yo no vamos a ser amigos”

Los hombres y el beso en la primera cita Cada vez que un hombre sale con una mujer, quiere saber si dio una buena impresión y si le gusta. Quiere saber si está pasando un buen momento con él y si está enganchada. Puede que él haya quedado fascinado, pero antes de hacer cualquier movimiento los hombres necesitan algún tipo de señal que les dé a entender que está todo bien.

La mayoría de los hombres quieren besar a las mujeres en la primera cita. Lo más pronto las besen, lo más pronto las pueden llevar a una siguiente nivel ¿Verdad?

Por supuesto que hay excepciones: está el que le encaja un beso de una y también el dormido, que por miedo a ser rechazado, evita llegar a la instancia del beso.

Las mujeres y el beso en la primera cita Bueno, las mujeres no son tan diferentes a los hombres. A ellas les gusta mucho besar y si el hombre les parece atractivo es algo que van a esperar que suceda en la primer cita.

A pesar de que ellas quieren ese beso, a las mujeres les gusta llevar el asunto un poco más lento. Les gusta que las conquisten un poco antes de dar ese paso. Una conversación que evolucione en risas y complicidad es una buena señal.

Pero las mujeres necesitan estar seguras que ese hombre vale la pena, por lo tanto, lo antes que el hombre demuestre que vale la pena, lo antes que la mujer va a estas dispuesta a avanzar (atención! Que un hombre quiera demostrar en 5 minutos de charlo lo increíble que es tiene el efecto contario) [Lee: ajajaj]

¿Tanto lío por un beso? Un beso puede ser algo fantástico, pero por supuesto que implica cosas. No hay vuelta atrás después de un beso y puede dejar a alguno de los dos (o tal vez a los dos) pensando hacia donde van.

Es verdad que a algunas personas no les gusta tanto la idea de besar a alguien con el que solamente estuvo un par de horas. Claro que si vivís en la ciudad, donde el ritmo es mucho más acelerado, sabés que besar en una primera salida en general es más una norma que algo inusual.

Un beso también sirve para analizar compatibilidad. Sentir que el beso que nos dan es un mal beso en general es sinónimo de que la relación no va a funcionar, o mismo que el sexo no va a ser bueno. Y aunque con un buen beso no se pueda pronosticar si son compatibles, al menos es un paso con el pie derecho.

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Cuando SI besar en una primera cita. Besar en una primera cita no está mal, para nada, pero si hay que saber cuándo está bien y cuando es mejor esperar un poco. Acá van algunas circunstancias en las que besar, está totalmente permitido:

Atracción mutua: Se conocen de antes y ambos sentían mucha atracción por el otro desde antes de la cita. Mucha química: la mesa de al lado puede notarlo, se están besando con la mirada y mueren por darse un beso de una vez. Ya venían hablando: se vienen hablando desde hace tiempo y se sabe con claridad la intención de la cita. Cita perfecta: todo salió perfecto y ambos la están pasando muy bien. No perdés nada: es una cita muy improvisada y todo parece que no van a verse nunca mas.

Cuando NO besar en una primera cita. Hay algunas situaciones en las que mejor dejar pasar la oportunidad.

Cita muy corta: la salida dura muy poco y no hay suficiente confianza todavía. No está bueno besar extraños. No te convence: no estás seguro/a si querés volver a ver a esa persona. Te estresa el tema: si pensar toda la cita en el beso que tal vez se den te pone nerviosa/o, mejor simplemente decidir de ante mano no dar ese beso y disfrutar de verdad la salida. Ni una señal: la otra pareciera querer evitar a toda costa un acercamiento. Mejor ni intentarlo. ​

Primer beso y miedo al rechazo

Muchas personas llevan la política de no besar en la primera cita pase lo que pase. Para otros el beso al final de la salida es previsible y mata el romanticismo o la sorpresa del primer beso.

Por otra parte, algunas mujeres pensarían que es dulce que un hombre espere a la próxima salida para darle un beso. Por el contrario, algunas mujeres toman como extraño o desinterés que el hombre no les dé un beso antes de que termine la primera cita.

Los hombres terminan confundidos porque no saben bien que hacer. Si ven que su cita es una potencial pareja va a tratar de evitar el beso para no arriesgarse, a menos que las señales sean muy claras.

Mujeres, si quieren que el hombre las bese, denle algunas señales sutiles.

Hombres, a ustedes les toca trabajar con magia y ayudar a que la mujer se sienta a gusto y en confianza.

​TANTEAR EL AGUA ANTES DE TIRARSE A LA PILETA.

La clave es ir con la corriente. No hay que ponerse ansioso ni negarse por completo al beso. Si realmente te gusta la otra persona y querés besarla pero no ves demasiada agua en la pileta, esperá hasta que la cita avance un poco más.

Ahora ya te está mandando señales. Ya sabés que está todo bien y el tema es animarte al beso.

La clave es encontrar alguna excusa (por favor que no sea tan obvia) para achicar la distancia entre ustedes. Podés cambiarte de asiento o hacerle algún comentario sobre su pelo, o también mostrarle algo en el celular. Pero algo más importante es que sea un beso feliz y gran parte de ese trabajo lo facilitan las risas.

Besar después de reírse a carcajadas le da a ese momento nervioso, el tinte de complicidad que necesitan.​